Si te ya aburrió la apariencia común y ordinaria de tu Nintendo Wii, no tienes porque resignarte a ello, porque mejor no lo personalizas a tu gusto.
Para ello tenemos varias opciones. La primera es usar tu Wii como si fuera un lienzo y pintar directo sobre el el diseño que quieras, ya sea con plumones o pinturas. Para esto tienes que tomar en cuenta que no hay margen para errores, o puedes arruinar tu Wii para siempre, así que si no se te da la cuestión pictórica, es mejor ni intentarlo.
La segunda es comprar alguna de las ’skins’ que empresas como Overstock, algunos de cuyos modelos estamos usando para ilustrar este post, están vendiendo ya vía internet a precios relativamente accesibles. Overstock las vende en aproximadamente $20 dlls.
Para ello tenemos varias opciones. La primera es usar tu Wii como si fuera un lienzo y pintar directo sobre el el diseño que quieras, ya sea con plumones o pinturas. Para esto tienes que tomar en cuenta que no hay margen para errores, o puedes arruinar tu Wii para siempre, así que si no se te da la cuestión pictórica, es mejor ni intentarlo.
La segunda es comprar alguna de las ’skins’ que empresas como Overstock, algunos de cuyos modelos estamos usando para ilustrar este post, están vendiendo ya vía internet a precios relativamente accesibles. Overstock las vende en aproximadamente $20 dlls.
La tercera es realizar tu propio diseño y acudir a algún sitio donde se hagan impresiones profesionales para que te lo impriman en vinil adherible. Para esta opción lo primero que hay que hacer es medir las diferentes caras de la carcasa de tu Wii. Luego, si tienes conocimientos de programas como Corel Draw y Photoshop, realizar tu diseño a tu gusto. Si no manejas ninguno de estos programas o sus equivalentes, puedes buscar una textura que te guste y hacer que te la impriman, la imagen de abajo es un buen ejemplo de lo que se puede lograr con esta alternativa.
Ya teniendo tus viniles listos, solo queda pegarlos con mucho cuidado, preferentemente empezando desde las esquinas, y teniendo un cutter a la mano para cortar los sobrantes que puedan tener las impresiones.
Lo último es simplemente disfrutar y presumir tu Wii, y cambiarlo los viniles cuando el calor empiece a despegarlos o dañarlos, o simplemente cuando te aburras de ellos.
Lo último es simplemente disfrutar y presumir tu Wii, y cambiarlo los viniles cuando el calor empiece a despegarlos o dañarlos, o simplemente cuando te aburras de ellos.
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