Los relojes digitales requieren tan poco energía que se han vuelto casi un campo experimental para demostrar que hay muchas fuentes de energía alternativa a las que podemos recurrir. Mi más reciente hallazgo en este sentido es el Citruc Clock, creación de un grupo que se hace llamar Anna Gram‘.
Florian Dussopt y Julie Girard, de Anna Gram’, con el apoyo de Atelier Chauvet y Anthemis (electronics), son los responsables de este sin lugar a dudas, muy curioso diseño.
Este reloj, que funciona hasta más de una semana con la energía que genera la electrólisis de un limón, es en realidad muy sencillo, ya que la tabla de madera, que en un extremo sirve de sostén a la pantallla, tiene en el otro extremo dos picos de cobre y zinc sobre los que se ponen las mitades del limón, y listo, así de simple.
Los autores ha dicho que esta creación persigue el propósito de recordarnos que la naturaleza, a pesar de las diversas transformaciones a las que la sometemos, sigue siendo nuestra fuente de energía directa.
Vía: LikeCool
Florian Dussopt y Julie Girard, de Anna Gram’, con el apoyo de Atelier Chauvet y Anthemis (electronics), son los responsables de este sin lugar a dudas, muy curioso diseño.
Este reloj, que funciona hasta más de una semana con la energía que genera la electrólisis de un limón, es en realidad muy sencillo, ya que la tabla de madera, que en un extremo sirve de sostén a la pantallla, tiene en el otro extremo dos picos de cobre y zinc sobre los que se ponen las mitades del limón, y listo, así de simple.
Los autores ha dicho que esta creación persigue el propósito de recordarnos que la naturaleza, a pesar de las diversas transformaciones a las que la sometemos, sigue siendo nuestra fuente de energía directa.
Vía: LikeCool
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